28 de diciembre de 2018

REDUCCIÓN EN PINO PIÑONERO

Este pino piñonero procede de semilla, sembrada por mi hace chiquicientos años, casi cuándo empecé con la afición, el caso es que ya había llegado a su máximo, llevaba cinco años en esa maceta y a pesar de haber disminuido el verde, había engordado notablemente, pero ya no daba más de sí, así que hoy tocó la reforma total del mismo, eliminación de todas las ramas excepto una, con la que pretendo rehacer y continuar su formación.

Mis intenciones son dejar sólo la primera rama de la izquierda y rehacer desde ahí. El primer problema consiste en que la rama es muy gruesa y forma un ángulo de noventa grados con el tronco y debo levantarla todo lo posible.

Para facilitar la torsión, con el serrucho abro un hueco en forma de cuña, lo que facilitará el movimiento de la rama. Es importante calcular el ángulo de la cuña ya que intentamos que las zonas cortadas queden en perfecta unión, ya que intentaremos que se autoinjerten, algo que no es necesario, pero que si se consigue pues parecerería mucho más natural.

Enrafiamos poniendo especial atención y fuerza, en la zona dónde pensamos que sufrirá mayor tensión.

También reforzamos esa misma zona con un par de alambres a modo de collarín. Si se parte esta zona, todo el trabajo se irá al traste.

  Y bajo la rama a subir fijamos la barra de hierro que nos servirá de palanca.


Con todo preparado y muy lentamente, comienzo a elevar la rama hasta un ángulo tal que me permita colocar el jack, aparatito que sin dudas, facilita mucho el trabajo y nos permitirá subir la rama con mucho más control y comodidad-

Una vez llevada a la posición deseada, ponemos un tensor provisional de alambre en la parte alta del tronco principal, que aunque lo vamos a eliminar, de momento nos servirá de soporte.

Con la rama ya aproximada, procedo a la eliminación de las demás ramas, de momento dejo la que sale por la derecha, es el plan B, por si por un casual, la rama que estamos doblando se parte, al menos tendríamos una rama verde para intentar hacer algo.

Estas son las paradojas del bonsai, la rama que salía horizontal al suelo pues tenemos que levantarla y ahora las que se quedan levantadas, pues tenemos que llevarlas hacia la horizontal, Para asegurarnos pues enrafiamos por los lugares dónde se producirán las torsiones. El tocón central también será reducido, pero de momento lo dejo porque me sirve de soporte para tensor que mantiene la rama con la que reharé el diseño, en su posición.

Alambro las ramas y empiezo a aproximarlas a su nuevo lugar. Lo que eran subramas de la rama principal, ahora se convertirán en rama principal, contrapeso, trasera y ápice.

Como podemos ver, la unión entre ambas partes es casi perfecta, realmente que se autoinjerten no es demasiado importante, pero si lo hacen, mejor que mejor. Por eso es conveniente cortar la cuña pensando en la unión de ambas partes una vez movida la rama. Caso de ser posible, un poco de pasta selladora en los bordes de unión vendría bien.

Para ayudar a la recuperación, trasplanto a una maceta de cultivo. Y así de feo queda el pobre pino, en espera de que la nueva brotación vaya cubriendo las zonas, pero el objetivo está conseguido, tengo una rama principal, una rama de contrapeso, una trasera y un ápice, así que de nuevo empieza el cultivo. Altura original antes del trabajo, 50 centímetros desde la superficie del sustrato, altura después de la reducción, 30 centímetros.

2 comentarios:

Unknown dijo...

Vaya trabajo!!! Eres un valiente...te va a quedar de maravilla...ya nos mostraras

Kai dijo...

De héroes está el cementerio lleno, espero que mi pino no sea el daño colateral. Gracias tu visita, y por supuesto que seguiré informando. Un saludo.