Es difícil resistir la tentación de plantar aquellos brotes y ramas podadas, siempre pueden venir bien para injertos de ramas o raíces, o para hacer probaturas de resistencia.
Estos son unos esquejes que ya han sufrido los primeros dobleces y ahora vuelvo a torturarlos. Es increible la moldeabilidad de los juníperos, lo aguantan prácticamente todo. La partida siempre es la misma, un tramo recto.