Sigo con el rescate de cosas viejas.
Uno de los mayores problemas que nos solemos encontrar es conseguir un nebari decente. Conseguir arreglar las raíces en un plantón de vivero a veces es una tarea difícil incluso imposible. Pero cuándo nuestra planta procede de semillas, nada es más fácil.
Este ejemplo corresponde a un Morus Alba, nacido de semilla en esta primavera, en el mes de junio lo saqué del semillero y planté en una maceta individual pequeña. Sobre el mes de agosto lo pasé a una maceta mayor, le corté la pivotante y disponiéndole de un drenaje "exagerado", más o menos un 30 por ciento del tiesto. Ahora a mediados de diciembre vuelvo a transplantar, corto un tercio de raíces y ahí va el trabajo. Para ello necesitares una porción de porexpan más pequeño que el diámetro de la maceta.
Con alambre fino haremos unas especies de horquillas que nos ayudarán a sujetar las raíces al porexpan.
Limpiaremos el cepellón y lo lavaremos. Como podemos comprobar en tan sólo unos meses ha desarrollado un buen pan de raíces.
Hacemos un buen recorte de raíces, las peinaremos, abriremos y situándole el porexpán debajo procederemos a pasar los alambres de modo que queden bien sujetas al porexpan. Para poder hacer una buena presión sobre ellas y que adopten el ángulo adecuado y una vez pasados los alambres abriremos éstos por la parte baja del porexpan (esto no viene en ningún libro).
Una vez bien sujetas procedemos a colocar el conjunto en la maceta elegida rellena previamente con una buena capa de drenaje y la mezcla elegida (en éste caso y como nos interesa un fuerte crecimiento el sustrato lleva un porcentaje alto de compost). También aprovecharemos para dar un último ordenado a las raíces.
Ya sólo nos queda tapar todo conjunto con más sustrato, con uno o dos dedos de altura es más que suficiente. El porexpán obligará a las raíces a crecer horizontalmente, en varios años y con los recortes correspondientes habremos conseguido un crecimiento radicular digno de ser sacado a la luz. Bastará con que lo vayamos destapando poco a poco.
Y como siempre recordar que en mi tierra no hace frio, encontrar un día que la temperatura baje de 5 grados es difícil, aquellos que vivaís en lugares menos templados tendreis que esperar al principio de la primavera para hacer trabajos de este tipo.
Han pasado once meses desde el anterior post. Ha llegado el momento de quitar el porexpan y ver lo que hay. Ahora lo que vamos a hacer es además de un nuevo trasplante, un recorte importante de raíces y plantado en una maceta un poco mayor.
Cuándo quitamos la arena superficial encontramos esto. Las raíces se han desarrollado en cantidad y presenta buen aspecto.
Limpiaremos con agua el cepellón y damos un buen recorte, podemos ver como las raíces han crecido de forma totalmente horizontal.
Aunque durante estos años ha estado un poco olvidado, comparando fotos es cuándo veo como se ha casi triplicado el grosor que tenía en 2005. Yo he usado porexpan pero también pueden utilizarse madera, plástico incluso un azulejo, o cualquier superficie plana que pueda ser colocada bajo las raíces.