16 de enero de 2018

AMOLADORA RECTA Y FRESA PARA TRABAJOS EN MADERA MUERTA

Pues llevaba tiempo queriendo adquirir una y los Reyes Magos que se enteran de todo, lo sabían y por fin llegó.
Tenía dudas entre la Makita GD0601, japonesa, la amoladora por excelencia en bonsai y la DWT de alta tecnología suiza. En precios iban a la par, en algunos lugares la Makita era más cara, pero por Amazon los precios era similares. En peso también similares, la Makita pesa 1,7 kgs mientras que la DWT pesa 1,68 kgs. Así como el cuello de agarre son en ambas muy cómodos y de igual longitud.

¿Por qué me decanté por la DWT? Pues fundamentalmente por dos motivos. El primero va en relación a la potencia, mientras Makita es de 400 watios, DWT tiene 600 watios, lo que influye evidentemente en su potencia de trabajo, Makita ofrece una velocidad máxima de 25.000 rpm, DWT da 27.000 rpm, un plus de velocidad, nada desdeñable. El segundo gran motivo es que DWT dispone de regulador de potencia, para desbaste, la alta velocidad es imprescindible, pero no todo es comer madera, también solemos usar cepillos, tanto plásticos como metálicos con los que la alta velocidad resulta fatal, ya que los degradan rápidamente, haciéndose imprescindible usarlos a bajas velocidades, aquí la versatilidad de DWT gana por goleada, ya que Makita no dispone de regulador de velocidad.

Otro punto a favor de DWT es que como complemento viene dotada de un grip suplementario (mango de agarre) que nos permitirá trabajar con mayor seguridad, caso de querer usarlo.

Lo que más que ha gustado de esta amoladora es que no tiene vibración y es super silenciosa, suena como un leve zumbido mucho más agradable y suave que mi Dremmel.
Pero como la amoladora necesita una fresa adecuada, vino la segunda parte del regalo. Después de un ligero estudio de mercado, compruebo que para nosotros, sólo existen tres marcas adecuadas: Samurai, Beaver y Terrier.

Había leído buenas críticas sobre Beaver y era la más barata, y sé por algún amigo que es buena fresa, hice un pedido y después de dos semanas, sigo esperando que me comuniquen los gastos de envío, así que deseché esta elección.

Samurai con su Gheisa y la Ninja Master, son fresas de gran prestigio y reputación, pero caras. Así que opté por la Terrier, algo más barata que Samurai y con mucho mejor acabado. Después de probarla no puedo estar más contento con la elección. Una auténtica come madera, impresiona la suavidad con que desbasta hasta la madera más dura y seca. Los recambios de sus cuchillas son más baratos y según cuentan, son de mayor durabilidad.

3 de enero de 2018

CERRO DE LAS CUEVAS.- SEGUNDO INTENTO DE PENJING.- PARTE I.

Desde hacía tiempo tenía ganas de hacer un penjing con una laja elaborada por mi, así que el año pasado y con hormigón realicé una prueba a ver que tal resultaba. A pesar de que salió fea de coj...., planté en ella unos plantones de cipreses. Pensaba que con el tiempo el feo color del cemento, adquiriría alguna tonalidad más envejecida, pero nada de nada. 
La realización del trabajo fue ésta:
Penjing de prueba.


Así que hoy, último día de vacaciones y con los trabajos previstos ya realizados, he aprovechado para desmontar el penjing y volverlo a montar sobre una laja de piedra natural, siguiendo el mismo proceso.
El trabajo está inspirado en un paso existente en el Parque Natural de Grazalema, en el Cerro de las Cuevas, un camino pedregoso, sombrío y húmedo dónde el musgo y el cerrado bosque, son los reyes del lugar. Si os interesa este sendero, podéis clicar aquí.


Voy a dejarlo reposar unos días y el siguiente paso será abrir un camino entre los árboles y forrar las piedras de musgo (cosa que se me antoja difícil, sin que aumente en exceso su volumen). Tal vez piedras más pequeñas me ayuden a conseguir algo más de proporcionalidad. Veo que esa piedra central ya está estorbando.