En 2019 hice una remodelación en mis patios, resultado de ella fue
que me sobraban varias boungavillas de varios colores que durante años
mantuve como plantas de exorno y al no saber que hacer con ellas les dí una fuerte poda tanto de ramas como de raíces, estaban en macetones muy grandes y las tuve que acondicionar para que entrasen en macetas pequeñas, no sé si alguna de ellas llegará algún día
a merecer una maceta de bonsai, pero aquí empezaba el largo y tortuoso
camino.
Bouganvilla 1.
Es un intento de adosado a una piedra, nunca vi un ejemplar de bouganvilla
con este diseño así que vamos ello. Tenía dos fuertes raíces en Y invertida y si cortaba una de ellas hubiese peligrado su vida. La piedra fue tallada en primera
instancia buscando dar paso a las raíces principales. No sé de qué variedad se trata,
florece mucho y las brácteas son más pequeñas que en Bouganvilla glabra.
Colores blancos y magentas. Un temporal de levante fuerte hizo estragos en todas ellas, rompiendo ramas de forma indiscriminada, por eso las segundas fotos están más peladas.
Boungavilla 2. Es la variedad clásica de la B. glabra pero con hojas más pequeñas y delicadas, brácteas color púrpura. Es
un triple tronco, una pena que el tachiagari sea más delgado que la
zona de nacimiento de los tres troncos, con el tiempo no creo que pueda corregirse.
Bounganvilla 4.-
Bouganvilla glabra tradicional. Un doble tronco que nacen de la misma
raíz. Me gusta el movimiento armónico que llevan ambos troncos. Desgraciadamente la parte alta de ambos troncos terminó secándose así que atpc la parte seca.
Bouganvilla 5.- Otra Bouganvilla glabra. En este caso su crecimiento ha sido escaso. En ésta, hay poco que rascar.
Bouganvilla 6.- Un ejemplar de flores amarillas.
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