Hoy le tocó el turno a un membrillo común (Cydonia oblonga), recolectado a principios de 2010 y que desde entonces lleva deambulando por mi azotea sin que le haya prestado mucha atención. En el mes de Junio de dicho año, presentaba este aspecto.
Como principales defectos pues que tenía pocas ramas y todas largas y era demasiado alto para el grueso de su tronco y muy pocas y gruesas raíces. Y en corregir estos defectos es en lo que estoy.
Como suele ser habitual (por mí), al finalizar el segundo año desde la recolección hago un transplante para proceder a ese arreglo de raíces que por prudencia no suelo realizar conforme los recolecto. Siempre dejó más de la cuenta a sabiendas que para cortar, siempre hay tiempo. Como era previsible el cepellón se había desarrollado considerablemente, aquí una vez recortado, las raíces gruesas fuera, y de las nuevas aproximadamente la mitad. También aprovecho para alambrar (de forma bastante chapuza por cierto, pero efectiva) algunas ramas que están excesivamente fuera de lugar. Al año siguiente, ya en 2011 el asunto de las raíces estuvo solucionado.
El asunto de la ramificación iba más lento, no emite demasiadas ramas nuevas y por otra parte, todas crecían hacia arriba y debía ir bajándolas poco a poco lo que unido la fuerza apical de los brotes y el poco interés que despertaba en mi pues hicieron el resto. En los cuatro primeros años no era muy lo que había mejorado aunque el aumento grosor del tronco sí era evidente.
Para 2017 empezaba a gustarme, ya tenía algo de subramificación, pero en el tronco padre la primera rama salía casi a la mitad de la longitud total del mismo. En la foto de 2020 vemos el gran vacío y lo que es peor, el último tercio del tronco no tenía conocidad, era recto y demasiado largo.
Y en esto último ha consistido el trabajo de hoy, por un lado acortaré los ápices de ambos troncos y por otro, pues injertaré una ramita en este tramo bajo que se niega a darme una rama "original". Esta rama es de vital importancia ya que será la primera rama de todo el árbol y por tanto, debe ser potente.
Una de las porciones cortadas la utilizo para el injerto de púa, encinto con Buddy Tape y cubro con una bolsita de plástico para mantener protegido la rama injertada.